A pesar de haber aún más canales para conseguir los contactos adecuados, el puesto de trabajo deseado o el proyecto empresarial soñado, el networking se ha convertido en la autopista más rápida y con mejores resultados para alcanzar lo que anhelemos.
Aún recuerdo, en los inicios del 2000, cuando era Product Manger de una editorial de Barcelona, y me encomendaban un mercado y yo debía encontrar posibles /potenciales empresas que pudieran estar interesadas en nuestros monográficos de Servicios Empresariales diversos. En esa época, no tenía mi red de contactos para poder acelerar las gestiones y conseguir mis objetivos. Tenía que llamar empresa a empresa y explicarles mi “película” para generar algo de confianza y si tenía un poco de suerte, generaba un cliente nuevo. Reconozco que no me fue nada mal, ya que mi discurso era sólido, basado en el conocimiento del mercado, y nuestros precios competitivos.
20 años más tarde, puedo decir sin riesgo a equivocarme, que, quien no tenga un círculo de networking amplio y actualizado, difícilmente podrá cambiar de trabajo o desarrollar proyectos empresariales que tengan solidez y sean longevos. ¡Así de rotundo y a su vez, aterrador!
Tener o no tener networking no se basa en tener contactos o no tenerlos. Esa es una pequeña base de los mismos. Pero el networking se basa en muchos más parámetros que tener el nombre, apellidos, email, móvil y amigo en LinkedIn.
Para considerarte un verdadero networker (canalizador), aunque para mí prefiero la palabra Connector, hay que potenciar actitudes que son imprescindibles para generar confianza: comunicar bien, saber resumir situaciones y lo que se necesita, escuchar, potenciar la empatía, saber filtrar información y no opinar por boca de otros.
Como conector, recibo muchos impactos diarios que pueden ser interesantes, todos o casi todos lo son en apariencia, pero después debes saber filtrar cuáles son los realmente prioritarios para desarrollar negocio a través del networking. El mundo ha ido evolucionando y la transversalidad digital ha hecho que puedas conectar con cualquier persona del mundo gracias a internet, y eso ha hecho que todo se acelere, aunque sin control y sin orden
Y es que la gente está acostumbrada a una manera de trabajar como se hacía antaño en las empresas. Pero en la actualidad, cuando estamos creando nuevos negocios, buscando inversores, patrocinadores o simplemente nuevos clientes, todo vale. Tirar de contactos de uno, llamar a otro para que viralice entre sus contactos un proyecto, uso de las RR.SS. de uno mismo por si alguien pica… en fin un desastre.
Se han acelerado las gestiones, pero no de manera ordenada y profesional. Y eso es lo que más debemos mejorar si queremos ser un networker profesional.
En Romero comprendimos que debíamos liderar esa tendencia. Y para ello creamos nuestra propia comunidad de networking a partir de una filosofía empresarial y social: el Premium Newtwoking, y garantizábamos la transparencia y la profesionalidad a través precisamente de compartir valores humanos como garantía sine qua non de la confianza depositada en nuestra empresa y personas que la componían.
Y por ello cuando conectamos a personas a través de nuestro connector Romero, exigimos una manera de proceder, profesional y a su vez humana: que es comunicar a las personas involucradas todas las gestiones y avances que se produzcan. ¿Qué eso es más trabajo? Pues sí, lo reconozco, pero elimina dudas y desconfianzas. Y como es un hábito, a medida que se va introduciendo en el día a día de uno, el esfuerzo se nota menos. Porque se da un paso adelante, y a la vez, se está pensando en todas las personas que están involucradas. ¡Y de veras que funciona!
De esta manera Romero ha desarrollado una comunidad de networkers que permiten a los que están en la misma, desarrollar más fácilmente los contactos adecuados para sus necesidades profesionales. Hasta el punto que cualquier iniciativa profesional que nos proponemos realzar, solamente la planteamos a través de nuestro network (canal), y si allí no logramos encontrar a los contactos adecuados (networkers), desestimamos la operación. El nivel de fracasos y equivocaciones profesionales han caído a la mínima expresión, y eso hace pensar que seguirá así porque los sistemas de seguridad de la comunidad siempre están encendidos y nos ayudan a preservar el devenir de los que la conformamos.
En resumen, se tiene que crear un método de trabajo para ser networker, ordenado y siempre tenerlo todo bien ubicado en documentos (¡CRM, Excel, etc) además de tenerlos bien guardados. Y para ir creando nuevos individuos que entren en tu comunidad, labrar la relación a base de valores humanos como la transparencia, profesionalidad y la honestidad. Dar siempre, peros si no se recibe en un tiempo prudencial, abandonar ese contacto porque no es networker, es un aprovechado.
Decir la verdad ayuda, a pesar que puede quebrar muchas relaciones y proyectos. Y huir de personas que parecen perfectas por sus presuntos contactos que lo único que quieren es intentar agenciarse los tuyos sin darte nada a cambio.